Todo va avanzando porque el transcurrir del tiempo es inexorable, te digan lo que te digan los que reparten fortuna en locales oscuros y sin ventanas en los que te revelan que pueden hacerte rico. El día se acerca y mañana van a echarme una pasta en la boca que les recordará lo que hay para adentrarles, adentrarnos, en lo que habrá.
Estuve viendo la cuarta de The Expanse, pagada por Amazon esta vez, y les ha salido una cosa más local, más menuda. Disfrutable, pero menos épica. La cosa les ha salido bien y es entretenida, pero es una fotografía inmóvil de un tema que no le interesa a nadie. No sé a dónde llegarán con eso, ¿habrá una quinta? Tengo que recordar la tercera, darle otro intento a los libros en inglés. No sé para qué, pero.
Estuve viendo también «Érase una vez en Holywood» de Tarantino y bueno, la estuve viendo. Muy meh. Cosas que le interesan al director, pero en vez de comentarlas un domingo con el aperitivo va y monta una peli. Qué agradable es el poder hacer. En el WoW he dejado al druida al 59 y no parece que me surjan ganas de terminar de levelearlo. Mi cabeza es una cosa muy rara de la que quizá, si escribiera por aquí todos los días, conseguiría hacer al menos una aproximación.
Pero no lo hago.