Ingenieros daneses han puesto a punto una nueva tecnlogía capaz de dar a los vehículos de hidrógeno la misma autonomía de la que disfrutan los coches de gasolina. Se trata de una especie de píldora o comprimido que almacena hidrógeno sólido y que puede ser trasladado con seguridad y consumido a discreción. Se recarga empapando de nuevo con amoniaco su superficie. Con esta tecnología un vehículo podría recorrer 600 kilómetros con un depósito de hidrógeno equivalente a uno de gasolina.