Tenía los ojos tan puestos en el presente/pasado/futuro de la circunvolución existencial que no me di cuenta de lo que vivía. Es una cuestión tremendamente sencilla: cuando uno espera perder, su camino se orienta en esa línea, y es incapaz de ver las victorias. Montaba en la bici camino al curro y los pájaros iban cantando sus cosas, la gente solía tropezar consigo misma en las aceras y mis piñones estaban bien engrasados cuando cambiaba de marcha. Me di cuenta de que el aire se hizo luz. Es complicado de explicar, pero en un momento me di cuenta de que el aire se hizo luz. Luego lo perdí. Y el todo volvió a ser cosas.
Plato grande, piñón pequeño: el desarrollo más largo. En la vida no es tan sencillo, y como lo sé, me empeño en la bicicleta. En la bicicleta es tremendamente sencillo poner el desarrollo más largo.
En todo lo demás es cuestión de ir probando.
Nota para explorers: mi cara, en el menú de la derecha, tenía un fondo transparente que el explorer es incapaz de reconocer y le coloca un absurdo fondo blanco, y todo porque era png, he tenido que convertirla a gif. Deberíais pasaros por la web de firefox si todavía navegáis con explorer. Veréis cosas güenas.