Año: 2019
nadir
Ayer estuve escribiendo un par de horas, avancé poco pero me lo pasé bien. Después estuve probando la instalacion de juindos en el nuevo ssd jugando a trópico 6, acabé una misión y me lo pasé bien. Unas partidas al hots, hice la cena, miré la calle desde la terraza y me sentí bien. Esta mañana he estado liado con las mancuernas un cuartico de hora (nada serio, las subo y las bajo, me invento tandas inútiles que repito como si estuviera en un concurso), he recogido la cocina y hecho la cama y me he ido a caminar, unos cuarenta minutos. He lavado el coche, he comprobado la presión de las ruedas, he echado gasolina y he comprado el desayuno antes de ir al trabajo, puntual.
Me da vértigo.
clipperz
Clipperz es un gestor de contraseñas gratuito que llevo usando alrededor de diez años (catorce, aunque me haga polvo).
Puedes descargarte una copia offline para utilizar cuando el servidor esté caído (yo nunca lo he visto), puedes asignarle un pin a un dispositivo para no tener que escribir usuario y contraseña cuando entres desde él. Admite haste 100 megas de adjuntos (que suelen ser claves de recuperación en .txt, así que es espacio más que de sobra, yo en todo este tiempo llevo utilizados 9.37 kB) y tiene un generador de claves aleatorias configurable. Puedes utilizar etiquetas para organizar las claves, archivar las que ya no usas pero prefieres conservar y eliminar las que no. Utilizan tu usuario y contraseña para encriptar la información y no los almacenan, así que si se te olvida uno de los dos no hay forma de recuperarlo, con eso hay que tener cuidado.
El problema de utilizar contraseñas iguales para varios servicios relacionadas con una misma dirección de correo electrónico no es que alguien la reviente, sino más bien que sea accesible mediante alguna vulnerabilidad (y son relativamente frecuentes) y empiecen a «probar» con ella en los demás servicios y a acceder. Es importante que las contraseñas sean únicas, independientemente de si son más o menos intrincadas. Hay gente que utiliza una sola pero personalizada en cada caso, utilizando una base común y añadiendo las dos primeras letras del servicio en algún momento, por ejemplo.
A mí me gusta clipperz. Me fascina que una herramienta tan potente y versátil esté a disposición de todo el mundo de forma gratuita. Tambien, claro, aceptan donaciones.