# perdiendo.org/museodemetralla

entraron en mi cabeza (201) | libros (20) | me lo llevo puesto (7) | pelis (2) | Renta básica (9) | series (6) | escasez (2) | frikeando (94) | arduino (1) | autoreferencial (11) | bici (1) | esperanto (4) | eve online (3) | git (2) | GNU/linux (4) | markdown (7) | nexus7 (2) | python (7) | raspberry pi (3) | vim (1) | wordpress (1) | zatchtronics (3) | hago (759) | canciones (157) | borradores (7) | cover (42) | el extremo inútil de la escoba (2) | elec (1) | GRACO (2) | guitarlele (11) | ruiditos (11) | Solenoide (1) | fotos (37) | nanowrimo (3) | novela (26) | criaturas del pantano (5) | el año que no follamos (12) | huim (5) | rehab (4) | poemas (356) | Anclajes (15) | andando (3) | B.A.R (7) | Canción de cuna para un borracho (38) | Cercos vacíos (37) | Cien puentes en la cabeza (7) | Conejo azul (6) | Contenido del juego (5) | De tiendas (3) | del pantano (3) | Destrozos (2) | Epilogo (4) | Fuegos de artificio (5) | Imposible rescate (15) | Jugando a rojo (7) | Libro del desencuentro (2) | Lo que sé de Marte (11) | Los cuentos (21) | Montaje del juego (5) | Orden de salida (4) | palitos (31) | Piernas abiertas (7) | Poemas medianos (12) | Privado de sueño (7) | rasguemas (5) | Tanto para nada (17) | Todo a 100 (2) | Uno (4) | relatos (96) | anatemas (9) | orbital (2) | prompts (8) | vindicaciones (103) | perdiendo (1.706) | atranques (1) |

toma de contacto

Libro de Clarke casi terminado, demasiadas cervezas, demasiados cigarros. He visto mortadelo y filemón, menuda mierda. Una y treinta y cinco y todo igual. Nada sirve de nada. Nada. Últimos cartuchos quemados. Informe de balística: fogueo. Sólo fogueo. Hay que cambiar de táctica. Los analistas recomiendan retirada total, y por una vez… quizá no vayan desencaminados. Fin del mensaje. Fin de la transmisión. Acabaremos las cervezas, daremos una vuelta. Mañana será el día de planeamiento de la toma de contacto. Hace una noche estupenda.

rabia

Rabia. Tan solo eso. Bueno, y algo de sentirme estúpido también. Dos semanas, dos semanas sin soledad. Estupendo. Ya lo dije, si no puede ser en pareja, será solo. Si no somos capaces de entender… Ni un día solos. Bien, es cuestión de metabolizarlo. Sólo me ha hecho falta decir que no tenía un plan determinado. Sólo eso. A lo mejor algún día se da cuenta. Es mejor no hablar. Sólo en este caso, pero es mejor no hablar, porque si no se da cuenta… entonces nada merece la pena. Si no le hace falta no hay cosa más triste excepto decirlo y observar la reacción, por compromiso. Sólo eso sería más triste. Eso duele, la incomprensión y saber que no le hace falta. Compartir piso, quizá es lo único. Somos buenos compañeros de piso, todo bien dividido. Nos comprendemos en ese sentido. Quizá es que no tengo ni idea. Es posible. Pero no entiendo cómo puede ser que no le haga falta, como el agua en este maldito calor. Sólo hay una interpretación posible. Es cuestión de acostumbrarse. Cervezas, las mías se enfrían en la nevera, un buen libro de Clarke, algo de jazz, y a irse acostumbrando, que nunca es tarde. Saludos.

incomprensión

La incomprensión es lo que mata. Es evidente. He ido a currar, todo normal, incluso un poco divertido si he de ser sincero. Después ha empezado a venir gente, Víctor y Leti, Solano y María, Koldo, Jose, David y Laura… Supongo que después de dos semanas de falta absoluta de intimidad es demasidado asfixiante. No quiero parecer desagradecido, me ha gustado mucho que vinieran todos ellos. No sé lo que quiero, pero me parece que implica de algún modo la soledad, o al menos la relación de pareja en soledad. Si no puede ser, me quedaré solo. Llevo mucho tiempo sin estar con Lore a solas. Cuando estamos a solas no estamos. La vida para mí siempre ha sido grandes cosas, grandes fiestas, grandes comidas, grandes polvos, grandes aventuras en bares. Esta tibieza me agota, me descentra, me agobia mucho. Empiezo a no valorar las cosas, porque son tibias. De nada me sirve hacer algo con Lore que ella no siente que quiere hacer. De nada me sirve que se limite a estar ahí. El hacerlo por mí no es suficiente, porque no es nada. Es algo que, sin mi impulso, simplemente no estaría. Quiero recuperar cosas que he sido, y digo eso quizá por no decir cosas que hemos sido. Soy una especie de gilipollas, supongo. Me iré a la cama con la sensación de un nuevo día perdido, y no porque no me lo haya pasado bien, sino porque no ha sido definitivo. Otra vez. Porque ha sido otro día. Sin más. No he querido salir, de nada sirve empeorar aún más las cosas. Medianizarlo todo más aún. No quiero que se me malinterprete. No digo que ciertas cosas estén mal por el hecho de ser tibias, sino que, simplemente, no necesito tibiezas ahora mismo. Mañana al curro, más medianía, tarde de siesta y luego… ¿qué?, ¿un par de bares sin demasiadas ganas, sin ímpetu? A veces me siento como una mula que tira de un carro de ilusión que cada vez se cree menos a sí mismo. Luego el domingo, sensación de domingo tarde después de comer, búsqueda paranóica de algo que justifique el fin de semana, visita a otro bar, o al cine, o a algún centro comercial, o a algún sitio donde echar una partida de algo que mate el tiempo. Ilusión. La incomprensión es lo que mata. Definitivamente. Cervezas.