para otro momento

Bueno, esto requeriría un poco de calma casera, pero como tengo el tiempo un poco liado me conformaré con hacerlo desde el curro. El fin de semana fue bruto, muy bruto, Ivan y Javi se quedaron a dormir en casa aunque yo me retiré temprano, aburrido.

El domingo vi a Lore, estuvimos tomando unas cervezas. Nada nuevo bajo el sol, pero al menos hablamos. No hay mucho que decir porque no quiero decir mucho, dejo en el tintero para otro momento a Rodrigo y a su hermano, a Rosa, a Miguelón, el día de la cerveza del Baiben, las tapas del domingo y, por supuesto, toda la tarde de después con Lore, y la despedida en la puerta de su casa. Todo eso se quedará para otro momento.